¿Debo comenzar una nueva relación después de la violencia doméstica? Solos en una pandemia, los sobrevivientes de violencia doméstica enfrentan decisiones difíciles. Autora: Lisa AF Con el estrés que viene generando el COVID-19 y el distanciamiento social, es fácil anhelar una relación que hará que todo el dolor desaparezca. Algunos sobrevivientes de violencia doméstica quieren otra oportunidad de amar. Algunos se sienten perdidos cuando se separan de la pareja que abusó de ellos, perdiendo la compañía que incluso una relación de control proporciona. Pueden anhelar profundamente la promesa de amor y protección que el abusador no pudo proporcionar. Al mismo tiempo, los sobrevivientes de violencia doméstica pueden dudar en confiar en una nueva pareja, suelen estar preocupados en que se vuelva a repetir la violencia o estar en riesgo. LEER EN
Autor: Ana L. Gutiérrez Salegui En la introducción del libro “Superar un trauma” de Echeburua E. (2004) [1] se puede leer, “Los malos ratos se olvidan pero queda en el pozo de la memoria la huella del sufrimiento”. Esta frase contiene la esencia de uno de los problemas más graves secundarios a los malos tratos, las secuelas psicológicas. Para entender la trascendencia que tienen los malos tratos en la vida de las víctimas quizás debamos comenzar por diferenciar los conceptos “lesión psíquica” y “secuela psicológica” . “Los malos ratos se olvidan pero queda en el pozo de la memoria la huella del sufrimiento” Las lesiones psíquicas sobrevienen tras la experimentación de un suceso violento. Estaríamos hablando de una reacción aguda a la situación padecida. La víctima queda sumida en un estado psíquico que la incapacita parcial o totalmente para retomar su vida normal. las lesiones psíquicas se objetivan a través de la sintomatología cognitiva , conductual y fi